Mañana y después de poco más de seis meses voy a por el último ciclo con ingreso. Y después, tras las pruebas pertinentes, sólo espero, o quiero, o directamente... voy a estar muy atento a esas dos palabras que suenan a gloria: REMISIÓN COMPLETA. Porque confío en ello. Porque estoy seguro de que va a ser así.
Último ingreso después de tantos, parece mentira.
Es cierto que se me va a hacer más pesado que el resto, aunque mucha gente me dice "¿qué es uno cuándo ya has pasado cinco?". Y yo siempre pongo el mismo ejemplo: "Es como la época de los exámenes. Tienes seis, y al último llegas ya cansado, con ganas de que acabe antes de empezarlo. Es el que más cuesta estudiar".
Pues eso, con ganas de acabarlo ya y todavía no he empezado, jajaja.
En lo poquito que llevamos de año he conocido dos casos de Remisiones completas: una chica con linfoma, y un chico con leucemia. Yo, ahora veo esa meta cerca... sería increíble que para finales de febrero o principios de marzo todo volviese un poco a la normalidad.
El momento llega. Se puede. Y todos, todos, todos tenéis que saberlo, tenéis que ir a por ello.
Tampoco quiero cantar victoria antes de tiempo, pero confío ciegamente en alcanzar la primera gran meta dentro de muy poco. Y la cabeza hace mucho en todo esto. Muchísimo.
Luego ciclos ambulatorios hasta cumplir el primer año de quimioterapía, luego pastillas otro año, pero ¿y qué?, ¿y qué?, ¿Y QUÉ?. Pasito a paso y meta a meta. ¿Y cómo no? ¡Sonrisa a sonrisa ganamos!
Foto: Remisión Completa sí o sí. No hay más.
1 comentario:
FELICIDAD-ES esto.
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